(E.I.) VALORACIÓN DE LA ASIGNATURA

“¿TIC? ¿Qué es eso?” Ese fue mi primer pensamiento al escuchar que iba a cursar una asignatura con ese nombre, porque la verdad, no sabía prácticamente de lo que iba, es más, al principio incluso, caí en el error de referirme a ellas como las TICs, en lugar de TIC, simplemente.

Tan sólo han pasado unos cuantos meses desde entonces, pero ¡qué lejano parece!

Y es que desde aquél primer contacto hasta el día de hoy, han sido muchas horas de trabajo las que le he dedicado, mucho esfuerzo y mucha persistencia que personalmente, creo que han dado sus frutos.

Sin embargo, si me dicen que valore la asignatura en sí… Considero que hay que analizar varios puntos: como alumna he aprendido muchísimo, pero alcanzar todos esos conocimientos, me ha supuesto un esfuerzo enorme. Y realmente es así, cuando tienes que investigar por tu cuenta, cuando tienes que “buscarte la vida”, cuando más aprendes. Pero bajo mi punto de vista, en ocasiones llevábamos tal carga de trabajo, que no nos daba tiempo a asimilar y asentar bien los nuevos conocimientos, lo cual es una pena, porque precisamente todo cuanto hemos trabajado nos puede ser útil el día de mañana. 

Por otra parte, como futura maestra, me ha servido para ser más consciente de la importancia que las nuevas tecnologías tienen en nuestra vida y de lo que ello supone y supondrá en el ámbito educativo: es necesario “renovarse o morir”. O al menos, eso es lo que se nos intenta transmitir constantemente. Algo que creo que es totalmente cierto, pero que se contrapone con la realidad que vivimos en la propia Facultad de Educación: tenemos una asignatura centrada exclusivamente en las nuevas tecnologías donde se nos insiste que es preciso cambiar los antiguos recursos y modos de enseñanza, pero en el resto de las asignaturas apenas innovan: presentaciones en Power Point o vídeos, es lo máximo que nos ofrecen…

No obstante, si hay algo que verdaderamente he aprendido gracias a las TIC, es que no son los medios los que harán que cambie la enseñanza, sino lo que nosotros, como docentes, hagamos con ellos: el uso y el enfoque que le demos, será lo que determine los resultados.

Así pues, esta reflexión me hace darme cuenta de que aunque empecé con muy poquito, ahora me llevo mucho. 

De manera que,  finalmente sólo me queda decir que gracias. Gracias a todos los que lo habéis hecho posible.